sábado, 26 de agosto de 2006

Una papa más a la sopa

Tá bien, tá bien, para que se comprenda el siguiente post deberé venderme un poquito y empezar por confesar algo. Y es que gordo gordo no soy, ¿ven? Bueno, ya, tá bien, seamos sinceros: digamos que soy delgado. Bueno, ya, ya... como uno no miente... Entonces confieso con todo: soy realmente flaco. Y, bueno, ¿qué tan flaco? Bueno, bueno, no voy a entrar en descripciones; solo digamos que flaco. Por ahí entre un grupo de malhablados circula el rumor de que cuando llueve no me mojo... Pero ya sabemos todos que esas son habladurías de envidiosos (especialmente de una de mis hermanas, que cuando vamos a la playa y me saco la camiseta se queda mirando mi cintura y me dice entornando los ojos: "Estúpido").
 
Y, bueno, la cosa es que hace poquito justo hablaba de amigos del colegio. Les cuento que P. es una chica que estudió conmigo en esa época. P. y yo hace poco retomamos contacto, y nos comunicamos de vez en cuando. Ella ahora vive en Japón, está casada y es madre de dos niñitos que son un sol. P. escribe desde su celular, por lo que sus mensajes suelen ser cortitos y sin tildes. Yo le contesto con e-mails y ella los lee en su teléfono.
 
El asunto es que hace poco P. me pidió fotos de mis hermanas. Ya saben: las conoció, y luego de once años quiere ver cómo han crecido. Y yo que le mando las fotos, y aprovecho para enviarle una mía. Y su respuesta no se hizo esperar: que muy bonitas mis hermanas, que tal se parece a mi mamá, que tal es igualita a mí, solo que con cabello largo... Hasta que llegó el comentario sobre mi foto. Y el mensaje que me envió me hizo reír hasta más no poder. Aquí se los paso, con su estilo de escritura celularesca y todo:
 
Hazme un favor, trata d alimentarte mejor y de descansar un poco mas!!
 
¡Ja, ja, ja! ¡Ay, mi Dios! ¡Cómo me ha hecho reír esta mujer! ¡Ja, ja, ja! ¿Tan mal estaré? Deben de ser las trasnochadas para postear por aquí. ¿Ven como me tiene el blog? ¡Ja, ja, ja!
 
Fuera de bromas, da ternura saber que, a pesar de la distancia y a pesar del tiempo, hay gente que se preocupa por uno de un modo sano y bueno. Gente que por la estima que nos tiene y por el recuerdo de experiencias compartidas en común nos guarda amistad, calor humano, generosidad y un pedacito de su corazón. Pero pienso luego en Dios. Y pienso en que, si así me quiere una persona que alguna vez tuvo amistad conmigo, ¿cuánto más me querrá todo un Dios, tres personas cuya sustancia es el amor? Una vez leí algo que me dejó pensando: "Dios ama a cada uno más que todas las madres del mundo juntas". Esa frase me dejó pensando... por trece años, desde que la leí. Y ojalá que lo siga haciendo durante el resto de mi vida.
 
Ah, y sí, P.: prometo echarle una papa más a la sopa.

8 comentarios:

Marazul dijo...

Realmente, el amor de Dios es inmenso, es bueno estar conciente de eso y saberlo con toda la seguridad del mundo...
Por otro lado, si te alimentas bien no importa que estes flaco (salvo que tengas una tenia, jaja), gordo no es "saludable" y falco no es "desnutrido" necesariamente, no?

Kike dijo...

Sí, pues, flaco no es necesariamente desnutrido. Y yo calculo que si estuviera desnutrido ya me hubiera desmayado hace rato, je, je... Más bien, soy de buen diente, cuando no hay nada que lo perturbe. Pero como ahora ---para variar--- estuve mal del estómago, hasta eso se vio afectado. Pero ya me estoy recuperando :-)

Ecazes dijo...

Porsia
Comprate un par de zapatos con lastre...
:)

Kike dijo...

¡Sí, eso y andar con la ropa mojada todo el día! ¡Ja, ja, ja!

Milkus Maximus dijo...

Mirá, si querés yo te regalo unos cinco kilitos que me sobran por todas partes. me parece que es negocio para ambos ;)

Kike dijo...

¡Hombre, claro! ¡Hacemos el negocio de una vez, de una vez! ¡Ja, ja, ja! Habrá que ver, eso sí, si los cinco kilitos entran en una caja de DHL y si el correo la quiere traer ;-)

No, si la verdad es que estoy relativamente contento con mi contextura. Al menos cuando olvido las llaves puedo pasar todavía por las rendijas de la ventana, je, je...

Fuera de bromas, su visita es una de las que más me honra recibir en este blog, amigo Milkus. Más bien, y ya que estamos, ¿sería tan amable de escribirme al privado un momentito? Hay un asunto que quisiera consultarle.

Aquí su seguro servidor.

AleMamá dijo...

La envidia de la fea me corroe....te voy a odiar junto con mi marido. Si yo comiera lo que él, seguro nopaso por la puerta...en desquite, le digo que si fuera raza de pollos, ya lo hubieran eliminado :)

Kike dijo...

¡Ja, ja, ja! Deja, que los flacos tenemos nuestra función en el mundo. Aún no sabemos cuál es... pero de que la tenemos, la tenemos. Estamos coordinando con Dios para que nos la revele, ¡ja, ja, ja!