Hoy este blog abandona por un momento su habitual estilo. Lo mismo pasó hace tres años y, lamentablemente, por el mismo motivo.
Probablemente muchos de mis cuatro lectores no sepan qué es un sismo. Quien escribe pertenece a un selecto grupo al que se le ha conferido el dudoso privilegio de saber qué es uno. Por eso cuando leo "ocho coma ocho", yo sé lo que es eso. A Dios gracias, no lo he experimentado (el récord del que ---me oiga Dios--- nunca espero pasar ha sido cinco y pico); sin embargo, sé lo que es eso.
Por eso hoy no me queda otra que asegurarle a mis hermanos chilenos que rezo por ellos (no es mentira; lo hago), y pedir oraciones por ellos también.
Y en solidaridad, me animo a dirigir a los cuatro lectores de este blog a un artículo que reproduje por aquí en aquella ocasión, publicado en otro medio. Lo leen aquí. Es para que nadie me venga con estupideces sobre el abandono de Dios y el castigo y tonterías por el estilo. Es fácil llenarse la boca de palabras cuando se cae el techo. Lo difícil es hablar correctamente.
Salud, y fuerza, hermanos chilenos.
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12 comentarios:
Muchas gracias. Necesitamos solidaridad y oración y no esperaba menos de Uds, querido Quique.
Un abrazo
Hola, Alemamá. Que no se moleste mi amiga Marta, pero lo primero que pensé cuando lo del terremoto fue en ti y en tu familia. Leí en tu blog que están bien, y que Felipe estuvo bien asustado. (Por cierto, Marta está en Alemania, por eso no me preocupé por ella).
Peruanos y chilenos compartimos varias cosas (¡hasta enemistades bobas!), y una de ellas es saber qué es que tiemble la tierra. Por eso comparto su espanto, su dolor y su esperanza.
Leí que no viste imágenes del terremoto: no las veas. Es horrible.
Un fuerte abrazo.
Kike
LLoré con el artículo..:( tan lleno de verdad...
Mis oraciones para Chile...
Saludos Kike... :)
bye
Muy buen articulo. En verdad lo hace reflexionar y pensar a uno mismo de como ser mejores personas para el mundo.
Gracias y Adelante!
Cuando ocurrió el terremoto en el sur, tuve la oportunidad de ir a ayudar un poquitín.
Pude sentir a Cristo en cada enfermo, pero algo me llamó la atención más aun... uno de los damnificados le preguntó a uno de los del equipo de ayuda "¿Es usted un santo?".
Para algunos es más fácil darse cuenta de que Dios está en todas partes.
Gracias y bendiciones
Gracias a amigo!
no soy Mundy! ja ja
qué es mundy?
Hola, Marta. Mundy era un imbécil que comentaba tonteras sobre un grupo que había creado para divorciados católicos, pero completamente alejado del magisterio de la Iglesia.
Muy buen artículo.
Es la consabida pregunta de los que no encuentran a Dios porque no saben mirar.
Una vez pasando junto a unas chabolas hizo una persona esa pregunta. Le dije que si no creía en la existencia de Dios era inútil para él hacerse esa pregunta, que de lo que podía él estar seguro era de su propia existencia y le pregunté ¿donde estás tú?
¿Y qué te respondió, Fran?
El artículo en buenísimo y los peruanos, al menos los que conocí en el Máster, se caracterizan por su solidaridad.
Te he escrito un correo para que se lo hagas llegar a tu encantadora flaquita.
Tuve el primer niño a los 25 ¿calculasteis bien?.
Un abrazo
FELIZ PASCUA!!!
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