Se llama Karina y leía noticias en un canal nacional de televisión hasta que la sacaron de feo modo por un asunto que a nadie le quedó claro (por lo menos, a mí no).
Se llama Karina y me dejaba alelado cada vez que la veía narrar noticias en ese canal nacional de televisión. A veces prendía el televisor mientras comía tan solo para verla, y reconozco que jamás supe qué decía acerca del Gobierno, de los políticos, de los problemas del día y demás bobadas de las que se habla en un noticiero. No. Yo solo miraba las cosas importantes. Solo la miraba a ella. Guapísima.
Se llama Karina y me la encontré en la escalera.
Algunos saben que, por ciertas cosas de la vida, estoy trabajando temporalmente en cierto lugar mientras reemplazo a una persona. (Algunos saben, además, que de vez en cuando dicho trabajo es demoledor, y esa es la razón por la cual casi ni actualizo el blog últimamente: me deja sin cabeza para casi nada más).
Pues bien, el jueves de la semana pasada, mientras subía a almorzar, una chica muy guapa bajaba las escaleras. Nos cruzamos. No recordaba haberla visto antes, y me quedé gratamente sorprendido. Pero ahí quedó la cosa y yo seguí mi camino. Anocheció. Amaneció. Día primero.
Al día siguiente, al final de la jornada ---y agónico de cansancio---, lo que quedaba de mí subió a la cafetería por un brownie antes de ir a casa. Y, nuevamente, la misma chica bajaba las escaleras conversando con otra. Esta vez la miré un ratito antes de seguir mi camino. Una intuición nacía en el fondo de mi mente. Sin embargo, todo quedó ahí. Anocheció. Amaneció. Día segundo.
El lunes, nuevamente a la hora del almuerzo, mientras devoraba un delicioso pedazo de pollo que me mandó mi mamá, súbitamente recordé la intuición del viernes y se hizo la luz en mi interior. Casi me atraganto de la impresión. Casi grito. Casi me ahogo. Se preocuparon los compañeros de trabajo que almorzaban conmigo.
---¡Kike, tranquilo!
---¿Todo bien?
---¡Cof, cof! Ejem... Nah, no pasa nada. Oigan, una pregunta: ¿de casualidad Karina B... trabaja aquí?
---Sí.
---¿Quién? ---preguntó una amiga.
---Karina B...
---¿Y quién es esa?
---¿La del noticiero?
---Sí, la que botaron del canal tal.
---Ese canal hace veinte años era malísimo, ¿te acuerdas? ---terció algún desubicado.
---Pero ¿trabaja aquí?
---Sí. ¿No viste que cuando llegamos justo terminaba de almorzar y se iba?
Todos la habían visto menos yo: precisamente subí tarde ese día, y al oír la noticia de que me perdí de verla se me quitó el hambre.
Anocheció. Amaneció. Día tercero.
Se llama Karina y hoy martes, mientras almorzaba con la gente del diario, se le ocurrió asomarse a la cafetería.
¡Oh, maravilla de maravillas! ¡Oh, sorpresa de sorpresas! ¡Oh, bendición del destino! ¡Oh... guau!
Se llama Karina y... eh, ejem... ya averigüé su número de anexo.
¿Me hará caso? ¿Se dará cuenta de que somos el uno para el otro? Por lo menos ya tengo un punto de apoyo: su nombre también empieza con K. Empezaré por ahí. Fijo que cae.
Fuera de bromas, la belleza de la naturaleza y de los demás elementos de la creación que vemos a nuestro alrededor nos hablan de la belleza de Dios. Como dice san Pablo, ya la propia perfección de las cosas creadas es suficiente medio como para deducir que Él existe (Rm 1, 20). Y cuando nos encontramos con algo tan bonito como un bello atardecer, un paisaje impresionante, la inmensidad del mar o una mujer hermosa, un mismo sentimiento brota de nosotros: algo nos mueve, nos toca, nos remece. Yo creo que es el eco de otra belleza, anterior, original, tal vez no conocida, es cierto, pero que nuestro interior intuye y reclama por haber sido modelado a imagen de Dios. ¿Recuerdan la frase de Van der Meer que cité el otro día? Tan solo mirar alrededor hace que la siga afirmando.
Con razón dice la Escritura de cada cosa que terminaba de crear el Todopoderoso: "Y vio Dios que era bueno". Vio que era bueno. Como Karina.
P. S. Ehhh... disculpen, una preguntita: con todo esto de la igualdad de género, del lenguaje no discriminativo, de la corrección política y todas esas bobadas: ¿deberé escribir también una entrada sobre algún chico guapo y decir que me gustó para equilibrar la cosa y que nadie se sienta ofendido? ¿Y si no me gusta ninguno? Si alguien piensa así, por mí se puede ir al... bueno, al trabajo (dejémoslo así, para que rime).
18 comentarios:
Ajammmmmm, así que andamos enamorados? jeje pues a ver si nos cuentas si te animaste a llamarla.... y sobretodo si te contestó :)
Por mi no es necesario equilibrar nada :)
Saluditos :)
¡Ay, San Antonio!
Unas manitas pa`l Kike ¿si?
Usted hable de chicos o chicas si así lo prefiere. Claro, con cierta inclinación por las chicas. Yo no me quejaría.
mmmmm q celos q me dan!!!
vaya dicha la karina b jaja por robarle el corazon a mi amigocho kike.. ojala tengas suerte =)
ya sabes q t apoyo... y si no.. ps pa adelante a hay muchas mas.. jeje
y eso de escribir q te gustan los chicos ps yo diria q no.. digo al fin y al cabo nadie tendria pq ofenderse ya que la preferencia de cada quien es muy respetable.. =)
besosssssss!
Bueno K... ojala te animes a saludarla cuando te la encuentres en la cafeta o en las escaleras...y acompaña el saludo de una sonrisa... por ahi y que te devuelve de la misma manera. suerte con eso!
y sobre si escribes de hombres... no...mejor sigue escribiendo de chicas...y acompaña con alguna fotito jajajaja un abrazo
Jajajjaa... buen relato, me entretuve mucho. Habra que rezar a San antonio, ¿no?. Bendiciones.
Uy..Kike!!!...creooo que estas enamorado, je, je...
Y tienes razón cosas como por ejemplo una melodia perfecta en la música, producto del talento humano, nos hace recordar que lo divino existe.
Te recomiendo no escribir ningún post piropeando a un hombre ...(te puede traer problemas...) alguien puede pensar que en serio y acosarte.
Saludos,
Yola:
¿Enamorados? Nah. Tú, quizá, sí, por lo que leo en tu blog. Pero en mi caso, no. Léete la nota aclaratoria que puse.
Eso de que cuente si me contestó... el otro día un par de amigas del trabajo casi casi me llevan a rastras hasta su escritorio para que le hable, ¡ja, ja, ja!
Eso sí hubiera sido bien rastresro, ¡ja, ja, ja!
Salud.
Ecazes:
¡Sí, dile que me da varias manitas! ¡Ja, ja, ja! A ver si se porta, el amigo de Coimbra.
Saludazos.
Zegim:
Jo, pasaré por alto comentario...
¡Ja, ja, ja! Yo, ¿hablando de chicos? ¡Ja, ja, ja! Ya me lo imagino: "Sí, y lo vi, bajando por la escalera, fuerte, musculoso...", ¡ja, ja, ja!
No, gracias, yo paso, señor :-)
Vitoclick:
Pos gracias por el apoyo, que no pienso escribir de chicos, ¡ja, ja, ja!
José:
Hombre, pues iremos siguiendo sus enseñanzas, maestro. Dígame, ¿para cuándo publica el libro?
¡Ja, ja, ja!
Y sobre lo de publicar foto, ¡no seas flojo, pues! Métele un Google, que es bien fácil.
Padre Cristian:
¡Vaya!, por fin alguien que entendió un poquito mejor de qué iba la cosa, ¡ja, ja, ja! Pues sí, que eso era: un divertimento. Ya avisaremos si habrá que rezarle a san Antonio dendeveras.
Gracias por las bendiciones. Salud.
Carmen:
Ay, otra que me viene con lo de que estoy enamorado, ¡ja, ja, ja! Nah, léase la nota recontraaclaratoria que acabo de publicar.
Pasando a las cosas de fondo (a las cuales a veces mis lectores no pasan), tu ejemplo de la música es perfecto. A mí me ha pasado algunas veces con algunas de Bach: ¡grande, maestro! Los Conciertos de Brandenburgo: ¡oh, maravilla!
Y gracias por el consejo de no escribir sobre hombres, que de ahí me pueden acosar... ¡Uf, si contara! ¡Ja, ja, ja! Tal vez terminaría escribiendo algo como uno de tus posts, ¿recuerdas?, ese del tipo que te pidió dos botellas y tú no sabías para qué... ¡ja, ja, ja! Lo publicaste el día que pusiste que te lanzó un súper piropo... un chico de cinco años, je, je...
Oye, ¿y cuándo me responderás mi mail?
Yo creo que si eres hombre tienes que hablar de chicas... sino sería muy raro o jackson
Caramba, Estella: ¡gracias por apoyar mi recto desarrollo psicosexual! ¡Ja, ja, ja!
Nah, hombre, fuera de bromas, gracias por pasar por casa. Vuelva cuando quiera, ya sabe. Y no, no soy Jackson ni me gustan los chicos (tan solo par a que conste en el acta ;-)
Kike interesante lo que pones de Karina B. La conoci hace como dos años cuando por esas cosas de la vida gane unos premios en dicho canal y fui a recoger mi premio. Estuve un rato en el pasillo y en eso paso ella con Maricielo Effio. Linda la flaca, pero bien flaca man.
Saludos
David C (el del cole)
Y a uno que le gustan las flacas, je, je...
Salud.
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